
El Cada Vez Más Esencial Uso de Datos
Por: Rolando J. Vivas
Datos, datos y datos, Nuevamente el Covid-19 se ha convertido en ese factor mediante el cual hemos podido darnos cuenta de la importancia de los datos en nuestra vida diaria, hemos visto el excelso uso de la información y la tecnología por parte de países como Taiwán, Vietnam, Corea del Sur y Nueva Zelanda, que han respondido de magnifica forma al reto, mediante exhaustivas pruebas han detectado contagios antes de manifestarse, han rastreado posibles brotes de contagio, los han contenido y los han aislado para disminuir el avance del virus, lamentablemente en otros países la respuesta no ha sido la misma, se ha ignorado la evidencia y los datos recabados de la experiencia de otros países que sufrieron la pandemia antes, se ha compartido información falsa y distorsionada sobre tratamientos no aprobados, se han difundido análisis incompletos con información errónea, se han tratado de ocultar datos, de no hacer pruebas para ocultar el número de contagiados y se ha incluso hecho uso de supersticiones y mentiras para engañar a la población, esto en países como Italia y España, que en Europa se convirtieron en los primeros países más afectados, en el Reino Unido y en Rusia; Lo mismo se ha presentado en los EEUU, el país que se ha convertido en la mayor víctima de la pandemia, en Brasil, en dónde el virus también ha causado grandes estragos y en México, en dónde el ascenso en la gráfica de los contagios sigue ascendido a más de tres meses del primer contagio registrado.
En el mundo de las empresas, hoy podemos hablar ya de empresas que han hecho de los datos su principal ventaja competitiva, la llamadas empresas “data driven” que usan datos para los análisis de tenencias, gustos de sus clientes y toma de decisiones, esto no sólo en empresas de alta tecnología como Google, Amazon o Facebook (que con al análisis de datos ya pueden anticipar nuestros gustos, adivinar qué es lo que queremos o necesitamos), sino también en empresas más tradicionales como Wal Mart, Zara y Starbucks (que ya pueden anticipar tendencias, saber por qué compramos algo) , quienes ya se han integrado al mundo del Big Data, ese enorme “océano” de información disponible en la red, haciendo de procesos como la minería de datos o “data mining”, una mina de oro para recolectar valiosa información en la cual basan sus movimientos con el fin de captar la atención y la preferencia de sus clientes, así nos topamos con un mundo en que la información parecería convertirse en el nuevo gran objeto del deseo, en la cual la información se vuelve vital para moverse ágilmente y con mayor certidumbre en un mundo en dónde el los avances se han acelerado, la competencia se vuelve más feroz, los clientes más impredecibles y el entorno cada vez más cambiante, así es posible anticipar cambios abruptos y prepararnos mejor para no sólo sobrevivir a éstos cambios, también para obtener un mayor aprendizaje y volver más robusta nuestra operación y más precisa nuestra ejecución.
Hoy ya no es posible tomar decisiones impulsados y basados principalmente por nuestro instinto o intuición, el acceso a la información se ha vuelto universal y fluye de forma vertiginosa, y la oportunidad de explotarla al máximo está ahí, para esto se requiere la habilidad para extraerla y analizarla, pero no todo se queda en la obtención y en su procesamiento, también es necesario el poder discernir la información útil, de la inútil, la falsa de la verdadera, la esencial de la superficial, y para ello se requiere un criterio y un pensamiento crítico que nos ayude a ver con mayor objetividad éstos datos, hoy, la falta de información ya no es un problema, hoy en día el problema es que la abundancia de datos ya no nos deja ver lo que es útil, veraz e importante, y así como podemos ser muy hábiles recabándola, debemos de ser todavía más hábiles analizándola, obtener la información nos da conocimiento, poder utilizarla no dará sabiduría.
Desde algo muy sencillo y del día a día ¿Quieres elaborar un presupuesto? ¿Con que datos cuentas? ¿Dónde puedes obtener más información? ¿Cómo la puedes proyectar? ¿Cómo puedes construir un mapa del futuro que sirva de guía para tu estrategia los próximos meses? Los datos están por todos lados, pero hay que saber entenderlos y usarlos.