Por: Rolando J. Vivas

He platicado en ocasiones anteriores, sobre el gusto que alguna vez tuve por el básquetbol, lo practiqué alguna vez en la secundaria y pienso que lo jugaba bastante bien, aunque no era, ni soy una persona muy alta (1.77). En una ocasión, llegó un entrenador nuevo, y formó un equipo representativo de la escuela, de inmediato eligió a los alumnos más altos de todo el plantel. Así, sin pruebas ni nada, sólo descartó a todo el que fuera más bajo del estándar que tenía en mente, en automático quedé descartado para la “selección”,
y ahí, también yo decidí, sin pensarlo mucho, olvidarme del básquetbol. En aquél en entonces, me equivoqué y claro, no consideré que grandes estrellas del básquetbol, como Isahia Thomas o Nate Robinson, no pasaban del 1.80, bueno ni Michael Jordan pasaba de los 2 metros. Aquí hay otro factor importante, y una lección más que aprender, si en algún momento eres el más alto, siempre habrá alguien más alto que tú en algún otro lugar, si eres el más rápido, siempre habrá alguien más rápido que tú en algún otro lugar, si eres el que salta más, siempre habrá alguien que salte más que tú en algún otro lugar, una ventaja competitiva sencilla, no es nada que te asegure un lugar prominente, porque siempre habrá alguien que supere tu única ventaja. Era entonces, bastante joven para entender la lección, a fin de cuentas el tiempo, es el mejor maestro e incluso el mejor juez.

¿Y entonces cómo poder ser el mejor? ¿Cómo tener esa ventaja competitiva que nadie más tiene? ¿Y sobre todo, cómo hacer pedidrable la ventaja competitiva? Bueno, tiendas de libros hay muchas, tiendas en línea hay bastantes, tiendas de libros electrónicos hay muchas, pero Amazon no sólo hace eso, también vende dispositivos Kindle, vende aparatos electrónicos en general,  vende espacio de almacenamiento y servicios digitales en la nube, y por si fuera poco, da el servicio de streaming y tiene tiendas “grab n go” en los EEUU, ¿Quién más hace eso? ¿Quién más puede competir en tantos frentes como hace Amazon? Su ventaja competitiva es una composición imposible de vencer en el corto y en el mediano plazo, y por si fuera poco su obsesión con el cliente, suma todavía más a su favor. Puede haber mejores tiendas de libros, puede haber mejores tiendas en línea, pero todo eso, más la garantía de que te entregaran tu pedido en unas horas, sin costo y con garantía de entera satisfacción, ¿Cuántas tiendas hay así?

Una ventaja competitiva siempre te puede sacar adelante en el corto plazo, más no te asegura tu permanencia en el mediano y largo plazo. Una ventaja competitiva compuesta, es el mejor camino para mantenerse vigente y a salvo de la feroz competencia. De mis grupos de rock favorito, Van Halen, dominó el rock de los 80s gracias a una poderosa combinación de un genio fuera de serie de la guitarra, Eddie Van Halen, un cantante de alto impacto visua, que además era un extraordinario y ambicioso hombre de negocios, y una sólida sección rítmica creadora del llamado “brown sound” un sonido duro, intenso y cálido. Cuando DLR dejó la banda, éstos trajeron, no sólo a un nuevo vocalista, también a un veterano compositor de éxitos con ventas millonarias, guitarrista y exitoso emprendedor. Eddie Van Halen no sólo se conformó con ser uno de los guitarristas más innovadores de su época, sino que también se ponía sin miedo tras los teclados, para agregar una nueva dimensión de sonido a la banda ¿El resultado? Una sucesión de discos que llegaban uno tras otro al primer lugar de ventas sin excepción.

Uno de mis grandes héroes, Steve Jobs (los otros sin duda serían Winston Churchill y Arnold Schwarzenegger, éste último, fiscoconstructivista, actor y político), no sabía programar como Bill Gates, ni era un genio tecnológico como el asombroso Steve Wozniak, pero sus instintos de mercadólogo innato, más su interés por el budismo zen y su gusto por la caligrafía, le proporcionarían una visión muy diferente a la de sus contemporáneos y se convertirían en su ventaja compuesta, que lo harían único en la industria, capaz de dejar su huella imborrable dentro del mundo moderno en que vivimos. Jony Ive, uno de los colaboradores más cercanos de Jobs, explicaría la ventaja competitiva compuesta de Apple, como “tecnología basada con las artes liberales y las humanidades.” Decía el legendario cantante canadiense, Leonard Cohen, en su canción Im Your Man, “si quieres un boxeador, un compañero, un doctor, un chófer, o incluso si quieres que use una máscara, yo soy tu hombre”, ¿Cómo vencer a un amante así?

Una de mis series favoritas, The Walking Dead, no lo es precisamente por contar con zombies devoradores de humanos y abundanteviolencia gráfica, lo es por las historias llenas de suspenso, por los cambios en la personalidad de los protagonistas, por el brutal comentario social y por tener “héroes” falibles como Rick Grimes, antihéroes como Negan y Daryl Dixon, y villanos como Alpha, una combinación difícil de vencer. Cómo la hidra, uno de mis animales favoritos, le puedes cortar, la cabeza y a la hidra le crecerán dos, (como a Van Halen cuando perdió a DLR), así, en la ventaja compuesta y no en la sencilla, se encuentra la llamada anti fragilidad de la que nos habla Nassim Nicholas Taleb en varios de sus libros.

Como jugador novato de básquetbol,  debí pensar ser el más alto no lo es todo, que podía tener una mejor técnica, saltar más alto, ser más fuerte o más rápido, una combinación de éstas habilidades me hubiesen hecho más difícil de descartar o de ser superado por alguien más alto. En los negocios, no se puede sobrevivir o perdurar siendo sólo el más barato, o el más rápido, o el que más labor social hace, o el que más invierte en innovación y desarrollo, para convertirte en un verdadero negocio inmortal, su fundadores o directores deben combinar todas estas variables. Decía el extraordinario escritor de novelas gráficas, el legendario Alan Moore, “la vida no se divide en géneros, es una horrenda, romántica, trágica y cómica novela de ciencia ficción de vaqueros detectives, y si tienes suerte un poco pornográfica” (¿Alguien dijo Juan Orol?), así funciona y así tenemos que funcionar para lograr ser únicos, así logramos nuestra ventaja competitiva compuesta y nadie nos la podrá quitar.