Por: Rolando J. Vivas

No me parece que la controversia por el caso de la nadadora Lia Thomas en los EEUU debiese escalar de la forma en que ha ocurrio hasta ahora. Ciertamente se debe analizar bien el caso y determinar que Thomas cumpla con sus respectivos requerimientos de estudios y niveles hormonales, para determinar si, Thomas compite en iguales circunstancias de capacidad física que las demás competidoras nacidas mujeres. Thomas nació hombre, y en el año 2019 decidió iniciar un proceso de cambio de sexo. El proceso de cambio de sexo implica factores importantes a nivel físico (a diferencia del social, que incluye cambio de vestimenta y cambio de estatus legal) como la terapia hormonal, terapia psicológica y finalmente una operación de reasignación de sexo (transición médica). En el caso de Thomas, se habla de la terapia hormonal en proceso. Algo que reduciría la cantidad de testosterona en su cuerpo, y aumentará la cantidad de estrógenos en éste. Importante mencionar aquí, que la testosterona es la hormona determinante durante la gestación, para el sexo del producto. Importante señalar aquí, que la testosterona también es la causante durante la adolescencia, de la aparición de los llamados caracteres secundarios, como el engrosamiento de la voz y del vello corporal y mayor desarrollo muscular (además de en algunas ocasiones, una mayor estatura, dependiendo de la herencia genética), principalmente en la parte superior del cuerpo. Es la testosterona, la hormona encargada de definir y propiciar el carácter masculino en los especimenes machos del ser humano.

La testosterona es la hormona característica del género masculino. Cabe aclarar aquí que no es propia del macho, ya que también se presenta en la hembra. Importante señalar también que el macho posee abundantes cantidades de ésta, de ahí la capacidad de desarrollar más músculo y fuerza a diferencia de las mujeres. Las testosterona en cierta forma define al macho como el género de la especie con mayor capacidad para desarollar masa muscular y por ende, más fuerza. Como todo, esto es relativo, a pesar de la disparidad en las cantidades de testosterona, una mujer es capaz de desarollar más musculatura y fuerza, mediante un entrenamiento especial que un hombre sin entrenamiento alguno. En el caso de Lia Thomas, tenemos una persona con cierto desarrollo físico por casi toda una vida dedicada a la práctica de la natación (tiene actualmente 22 años y ha nadado desde los 5). A medida que la terapia hormonal transcurra, Thomas irá perdiendo parte de esa ventaja biológica de la testosterona, su estatura disminuirá, la relación entre su músculo y grasa corporal irá cambiando en detrimento del músculo, hasta que quede a niveles inferiores a los del hombre y muy similar a los de la mujer.

Es válido por el momento hablar de una cierta ventaja que Thomas podría tener por encima de las competidoras nacidas mujeres. Thomas aún no ha llevado a cabo una transición completa, considerando que sigue en el proceso y que incluso conserva sus genitales masculinos. Aún así, esa ventaja que podría resultar “arrolladora” por parte de Thomas, no se ha puesto de manifiesto del todo. Ciertamente, ha ganado a nivel universitario la competencia más importante, la de 500 yardas, aún así, no hay estudios concluyentes que demuestren el dominio de una mujer trans, en el mundo del deporte femenino. En lo personal puedo señalar que no hay casos documentados, en los que un hombre que ha llevado a cabo la totalidad de sus proceso de transición a mujer trans, haya logrado dominar de manera contundente algun deporte femenino que practique. Basta echar un vistazo en el caso de la natación femenil. En dónde las atletas nacidas como mujeres siguen dominando ampliamente el deporte y los tiempos record a nivel mundial siguen estando muy por encima, mucho, de lo que ha logrado Thomas. En lo particular, a pesar de su posible ventaja temporal, Thomas no ha logrado imponer ningún récord, lo que podríamos esperar, si tan mencionada ventaja se pusiera de manifiesto en el caso de Thomas.

Otro punto que llama mucho mi atención, es que Thomas ganó la competencia de las 500 yardas, no así la de 200 o las de 100, en dónde no se mostró tan competitiva, algo que ninguno de los conservadores, que usan el caso de Thomas, para denunciar a la llamada ideología de género, no mencionan o han optado convenientemente callar. Al igual que en la carrera de 100 mts, la carrera a nado de 100 yardas, es una competencia de explosividad, la cual se deriva de la musculatura del participante. En las carreras a pie, podemos ver a los corredores de 100 metros como individuos con una gran musculatura, mientras que los corredores de maratones, por lo general son muchos más delgados. Si la ventaja biológica de Thomas existiera en gran proporción, Thomas debería estar dominando competencias de 100 y 200 yardas y no la de 500. Cabe mencionar que en las competencias de la NCAA, en dónde Thomas ganó en las 500 yardas, hubo récords establecidos, ninguno por Thomas. Los resultados de Thomas en las competencias universitarias, contrastan por completo y de una forma dramática con los de Kate Douglass, nadadora de mucho menor estatura y musculatura que Thomas, y poseedora de casi 20 récords en éste tipo de competencias. Si hablamos en particular de Thomas y la competencia de nado de 500 yardas, los tiempos de Thomas superaron apenas por un segundo a la competidora que ocupó el segundo lugar. Adicional, los tiempos de Thomas están casi 10 segundos encima de los de Katie Ledecky, poseedora del récord en las 500 yardas, por ciento, la musculatura de Ledecky, pondría en vergüenza a la de muchos hombres que en su vida se han ejercitado.

Algo también importante de señalar aquí, es que la terapia hormonal altera la distribución de la masa muscular. En el caso del hombre, la masa se concentra en la parte superior del cuerpo, en el caso de mujer, en la parte inferior, una mujer con el adecuado entrenamiento, es capaz de desarollar una musculatura muy superior en las piernas, a la de un hombre sin entrenamiento, lo que podría explicar un poco que Thomas, gracias a su previo entrenamiento y terapia hormonal, podría tener un mejor desempeño en pruebas de larga distancia que requieren más resistencia y menos explosividad. Lo otro, podría obedecer tal vez a la estructura osea. El cuerpo de una atleta nacida mujer, posee diferencias anatómico estructurales que la hacen correr de una forma diferente a la de un hombre, derivado de estructuras como la cadera. Es posible que el estilo de nado de Thomas pudiera ser diferente del de las competidoras nacidas mujeres por un tema de estructuras anatómica y de entrenamiento como hombre, por largo tiempo. Aún así, ninguna de éstas “ventajas” sería determinante y no se ha puesto de manifiesto en que Thomas pudiera en un momento dado batir de forma contundente alguno de los récords actuales.

Por un lado, pienso que es importante asegurar el hecho que Thomas a completado una transición y que médicamente aunque haya nacido hombre, a nivel hormonal no posea una ventaja injusta por encima de sus competidoras nacidas mujer. Por otro lado hay que reconocer que si aún existe una ligera ventaja, la competidora que ocupó el segundo lugar, realmente merece el reconocimiento de estar haciendo un importante esfuerzo y logrando un tiempo con muy poca diferencia al de Thomas. Realmente no existe una amenza grave para las competidoras nacidas mujeres por parte de Thomas, el caso se ha magnificado como una manipulación mediática por sectores conservadores que solamente presentan una parte de la información y que buscan polarizar el discurso y dividir a la sociedad. Thomas no es por el momento una figura dominante en el deporte femenil, y las poseedoras de récords en ésta disciplinas siguen teniendo una ventaja abismal por sobre Thomas. Más importante aún, no hay registros de una mujer trans que destaque de manera abrumadora en ninguna disciplina femenil al día de hoy. Que Ron Desantis, Gabriel Quadri, y otros políticos de ultraderecha, busquen usar éste tipo de situaciones para sacar provecho para sus intereses personales, sólo es prueba de su mezquindad para usar datos a medias para engañar a la gente.

El hecho de que sectores ultra conservadores sean los que se muestren más ofendidos por el caso Thomas, muestra que solamente buscan manipular el discurso, buscan mostrarse como defensores de “mujeres indefensas”, las cuales si analizamos bien la información, podemos ver que se han defendido de maravilla. Cuando confirmamos que las mujeres son capaces de competir y defenderse de manera tan significativa, es fácil entender que el machismo, disfrazado de conservadurismo, se siente amenazado, sabe que parte de sus “valores” pertenecen al pasado y poco a poco se van yendo al basurero de la historia. Por eso tanto miedo y tanta rabia de los conservadores ante Lia Thomas. La frágil hombría de ellos se siente destruida ante nadadoras como Katie Ledecky, cuya capacidad competitiva no requieren “ayuda” de un hombre para dejar a Thomas “mordiendo el polvo”, en la piscina. ¿Alguien ha visto a Ledecky quejarse? Quienes se quejan cada vez mas son los machistas sienten que ya nadie los necesita. Ellos deberían estar poniendo en alto el trabajo de Ledecky, en lugar de dar publicidad a Thomas. Si Ledecky compitiera con hombres ganaría (ha nadado contra el nadador Ryan Lochte, y lo ha derrotado en prácticas), y sin quejarse. Eso aplasta cualquier argumento sobre la supuesta ventaja de Thomas.

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